Producción y Empleo: débiles cifras industriales anticipan un IMACEC en torno al 2%
La producción industrial cayó 2,9% en junio, resultado bajo la expectativa económica en el país, alcanzando -1,5% y -2,0%, respectivamente.
La mayor incidencia negativa en la producción industrial fue por cuenta de la baja de 5,4% en la producción manufacturera, la cual a su vez, también se ubicó por debajo de las expectativas (-2,1% a/a). La elaboración de alimentos registró la mayor incidencia negativa al caer 7,2% anual, a causa de las estrategias productivas de las empresas del rubro. Le siguieron en incidencia negativa, la elaboración de productos químicos y de productos minerales no metálicos, ambas por una menor demanda.
La producción minera, por su parte, presentó un crecimiento anual nulo, en el cual el avance de la minería no metálica (19,1% a/a) logró compensar la baja de la parte metálica. En esta última, destaca la caída en la producción de hierro (-16,7% a/a), y un desempeño plano en producción de cobre (0,2% a/a), resultado a su vez, influenciado por la paralización por huelga en Chuquicamata. Finalmente, el índice EGA decreció 4,2%, afectado por las bajas en la producción de gas y electricidad.
En definitiva, los datos sectoriales adelantan que el IMACEC de junio estará cercano a 2%. Se estima que se verán mejores cifras de actividad a partir de la lectura de julio, influenciada, principalmente, por menores bases de comparación.
En otro ámbito, la tasa de desempleo del trimestre finalizado en junio fue 7,1%, resultado levemente bajo las estimaciones de expertos (7,2%). En términos desestacionalizados, y en comparación al trimestre móvil anterior, la tasa de desocupación se mantuvo en 6,8%. La creación de empleo ligado a cotizantes en las AFP, con datos de la encuesta de empleo (2,0%) se compara con el 2,7% que reportan los registros administrativos, reflejando una tendencia en la baja en los últimos meses.
En términos de categoría ocupacional, la expansión de 1,0% de los ocupados fue liderada por los asalariados públicos que crecieron 6,4% anual, seguida por los trabajadores por cuenta propia (2,6%). En el periodo, destaca la contracción en el empleo asalariado privado (-1,0%).
En definitiva, se reduce el ritmo en la creación de empleo asalariado privado —primera contracción desde febrero— mientras que el empleo por cuenta propia y el asalariado público presentan una tendencia al alza en las últimas lecturas. De momento no hay indicios que la activación de proyectos de inversión se esté reflejando en un repunte en el estado del mercado laboral.
